¿Qué es la sabiduría convencional?
Sabiduría convencional
La sabiduría convencional se refiere a ideas y creencias comunes y ampliamente aceptadas. Puede abarcar ideas que generalmente son sostenidas por la mayoría de las personas, así como opiniones de expertos aceptadas desde hace mucho tiempo dentro de un campo o institución.
Este tipo de conocimiento puede tener ventajas e inconvenientes. A veces, estas ideas permiten que las personas comprendan el consenso mayoritario y lleguen a conclusiones rápidamente. En otros casos, la sabiduría convencional puede hacer que sea más difícil pensar creativamente y encontrar soluciones alternativas a los problemas.
El uso moderno del término sabiduría convencional se atribuye al economista John Kenneth Galbraith, quien analizó el tema en su libro de 1958. La sociedad rica. Galbraith describió la sabiduría convencional como un factor que aumentó la resistencia institucional y social al cambio.
Señales de sabiduría convencional
La sabiduría convencional es evidente en muchos aspectos de la vida cotidiana. Algunas señales de que está utilizando la sabiduría convencional para guiar su toma de decisiones incluyen:
- Aceptar ciertas ideas sin cuestionarlas.
- Información no desafiante que se ajuste a lo que espera encontrar
- Creer que la mayoría de la gente piensa que algo es verdad
- Suponiendo que la opinión de la mayoría debe ser cierta
- Pensar que algo es verdad simplemente porque suena razonable
- Aceptar algo como verdad debido a la tradición o autoridad
Cada vez que hace una suposición automáticamente sin pensarlo mucho, puede estar confiando en la sabiduría convencional como guía. Es importante recordar que si bien estas ideas son aceptadas, no significa que sean precisas.
La sabiduría convencional a menudo se basa en aceptar las cosas basándose en la fe en las opiniones y la experiencia de los demás. El problema es que este conocimiento no está necesariamente arraigado en evidencia verificable.
En muchos casos, su génesis puede estar en observaciones anecdóticas, supersticiones, folclore, malentendidos o incluso investigaciones mal diseñadas.
Tipos
La sabiduría convencional puede aplicarse a una amplia gama de temas. Algunas áreas en las que puede encontrar ese tipo de pensamiento incluyen:
- Política
- Gobierno
- Educación
- Cuidado de la salud
- Medicamento
- Organizaciones e instituciones
- Ciencia
- Académica
- Religión
- Ciencias económicas
- Bienestar
En todas estas áreas, las personas que trabajan en el campo con frecuencia confían en un cuerpo de conocimiento que sirve para informar y guiar futuras ideas y acciones. Si bien las personas en estos campos están investigando e innovando nuevas soluciones, gran parte de esta exploración todavía se basa en el conocimiento generalmente aceptado.
El uso o la aceptabilidad de una idea convencional también puede depender de su relevancia para la situación actual de una persona. Si algo parece más destacado, también puede verse como más preciso.
Ejemplos
En el campo de la política, la sabiduría convencional puede consistir en puntos de conversación que se repiten con tanta frecuencia que se aceptan con poco escrutinio, ya sea que sean precisos o no.
Un ejemplo de la sabiduría convencional en salud fue la creencia generalizada entre los consumidores y los profesionales médicos de que fumar cigarrillos no era un comportamiento riesgoso. Fue solo después de la investigación y de importantes campañas de salud pública que las personas comenzaron a cambiar sus creencias sobre los graves riesgos para la salud que plantea el tabaquismo.
Usos
Este tipo de conocimiento puede tener algunos usos diferentes. Puede servir como una forma de medir el consenso de la mayoría de la población. Ya sea que la idea en sí sea cierta o no, saber que la mayoría de la gente cree que es cierta puede proporcionar información sobre las necesidades, prioridades u opiniones de un grupo.
La sabiduría convencional también puede actuar como una especie de atajo mental. En lugar de tener que investigar todos los aspectos de un problema, confiar en la sabiduría convencional puede ayudar a las personas a tomar decisiones o llegar a conclusiones rápidamente.
Confiar en la sabiduría convencional puede ser útil cuando:
- No tienes tiempo para analizar cada aspecto de una situación o cada opción disponible
- Es importante obtener consenso en el grupo.
- Adaptarse al grupo y encajar es importante
- Estás tratando con un grupo u organización que se resiste a nuevas ideas.
También es importante reconocer que la sabiduría convencional puede ser correcta. Un ejemplo de la verdadera sabiduría convencional es que lavarse las manos con agua y jabón puede ayudar a prevenir la propagación de enfermedades. Cada campo tiene un conocimiento que se origina en la pericia y la experiencia de los miembros de ese grupo. Es posible que encuentre que el enfoque convencional es el más preciso o útil.
Impacto
Debido a que la sabiduría convencional generalmente no se cuestiona, puede crear problemas cuando las ideas incorrectas obtienen una amplia aceptación. Esto puede hacer que la exploración de nuevas ideas sea mucho más difícil.
Por ejemplo, la sabiduría convencional solía sugerir que las úlceras eran causadas únicamente por el estrés. Si bien esta idea prevaleció durante años, no fue hasta que los investigadores la desafiaron que se descubrió la principal causa subyacente, una bacteria específica.
En casos como este, la sabiduría convencional incorrecta puede interferir con la salud de una persona y el tipo de atención médica que recibe.
Las ideas convencionales pueden convertirse en una forma de inmovilidad funcional, lo que hace más difícil encontrar formas creativas de responder una pregunta o tratar un problema. Las ideas fijas sobre un problema interfieren con la capacidad de pensar fuera de la caja o encontrar nuevas formas de abordar el problema.
Las creencias convencionales también pueden cambiar muy lentamente. Incluso cuando la evidencia aumenta para contrarrestar una idea, las ideas convencionales pueden persistir.
Sin embargo, la buena noticia es que este tipo de pensamiento y conocimiento no es estático. Con el tiempo, a medida que la investigación respalda nuevas ideas y demuestra que las ideas anteriores eran incorrectas, los cambios comienzan a afianzarse y florecer.
Consejos
Si las ideas convencionales sobre un tema no parecen útiles o precisas, hay cosas que puede hacer para desafiarlas y probar nuevas formas de pensar. Algunas formas en que podría abordar esto:
- Explora la historia de la idea.: Dedique algún tiempo a investigar cómo surgió esta idea en primer lugar. ¿Hay un cuerpo de investigación en el que se basa? ¿Qué evidencia apoya su exactitud? ¿Hay alguna evidencia o dato que contradiga la idea?
- Investigar ideas alternativas: Dedique algún tiempo a pensar en hipótesis alternativas para explicar el fenómeno. Investigue estas nuevas ideas y pruébelas para determinar su precisión.
- hablar con otras personas: También puede discutir sus nuevas ideas con otros para tener una mejor idea de cómo otras personas podrían ver estas explicaciones alternativas. Lo que a usted le parece una buena idea puede parecerle a otros irracional o ilógico. Es posible que otras personas también puedan señalar otras ideas o explicaciones que quizás usted no haya considerado.
Cuando encuentra ideas que tienen sus raíces en la sabiduría convencional, a menudo tiene sentido examinarlas para evaluar su validez y precisión. Cuestionar esta sabiduría puede ayudar a inspirar más investigaciones que pueden respaldar o refutar viejas ideas y potencialmente conducir a explicaciones nuevas y más útiles.
Una palabra de Psyathome
La sabiduría convencional a menudo se caracteriza como un obstáculo para el pensamiento creativo. Debido a que conduce a ideas profundamente arraigadas que rara vez se evalúan por su precisión, puede ser muy difícil de cambiar. Reconsiderar la sabiduría convencional a menudo puede conducir a nuevas innovaciones.
Cambiar las creencias convencionales no siempre es fácil y, a veces, puede encontrarse con resistencia y otros resultados indeseables. Por ejemplo, algunas investigaciones sugieren que cuando las nuevas recomendaciones científicas o de salud desafían la sabiduría convencional, las personas pueden experimentar una disminución de la confianza en la información científica en general.