Vivir con un trastorno de ansiedad durante el embarazo agrega estrés a un momento de su vida que ya es difícil. En el caso del trastorno de ansiedad generalizada (TAG), la preocupación crónica asociada con el trastorno puede impedirle disfrutar de la experiencia de estar embarazada, desde el momento en que se entera hasta mucho después del nacimiento de su bebé.
Si experimenta una preocupación crónica que se siente fuera de su control, considere mencionar cómo se siente a su médico u otro profesional de la salud.
Predominio
Sabemos que alrededor del 6 % de la población experimentará el TAG durante su vida y, durante cualquier año, alrededor del 1 al 3 % de las personas vivirán con el TAG.El trastorno es dos veces más común en mujeres que en hombres, lo que lo hace particularmente relevante para el embarazo.
Se ha demostrado que la tasa de TAG durante el embarazo está en el rango de 8,5% a 10,5%.
El GAD tiende a no ser diagnosticado y puede ser difícil diferenciarlo de la preocupación normal. Del mismo modo, una mujer que siempre se preocupó puede desarrollar TAG durante el embarazo, posiblemente relacionado con cambios hormonales, estado mental y obligaciones sociales (p. ej., dejar el trabajo, prepararse para formar una familia).
Un estudio de 2011 mostró que los síntomas de ansiedad tienden a ser más altos en el primer trimestre y disminuyen a lo largo del embarazo.Sin embargo, muchas mujeres tienen GAD superpuesto con otros trastornos como la depresión, lo que puede hacer que ellas y sus hijos por nacer sean extremadamente vulnerables.
Riesgos y complicaciones
Un estudio longitudinal de 2015 de mujeres con trastorno depresivo mayor y TAG mostró que aquellas con TAG además de depresión tenían una peor calidad de vida y experimentaban una preocupación más persistente.
El GAD no tratado puede provocar complicaciones en el embarazo, como bajo peso al nacer, parto prematuro, presión arterial alta, problemas con el desarrollo neurológico del bebé y falta de progreso durante el trabajo de parto.
Una vez que llegue su bebé, también puede tener problemas para manejar las demandas de un recién nacido y desarrollar un vínculo con su bebé.
Opciones de tratamiento
El tratamiento del TAG durante el embarazo puede incluir psicoeducación, terapia y/o medicación. Por lo general, el tratamiento se adaptará a la situación única de la madre, teniendo en cuenta la gravedad de los síntomas y el historial de ansiedad:
- Psicoeducación es importante en las primeras etapas y durante el diagnóstico, para ayudar a reducir la negación y el estigma y conducir a un tratamiento exitoso.
- Terapia como la terapia cognitivo-conductual (TCC) se usa con mayor frecuencia sola en casos leves de TAG o en combinación con medicamentos en casos más graves. La TCC puede implicar reestructuración cognitiva, exposiciones, entrenamiento de relajación y terapia de atención plena.
- Medicamento puede usarse en casos más severos. Por lo general, se prescribe un inhibidor selectivo de la recaptación de serotonina (ISRS) (p. ej., Prozac, Lexapro). Las benzodiazepinas pueden usarse para el control a corto plazo de la ansiedad.
- Apoyo también es un componente importante del afrontamiento. Si tiene TAG y está embarazada, busque el apoyo de familiares, amigos y la comunidad para que le ayuden a sobrellevar la situación.
¿Puedo tomar medicamentos para el GAD durante el embarazo?
Si tiene GAD y está embarazada, es posible que se pregunte si es seguro que tome medicamentos. Si bien es mejor dejar esta decisión en manos de su médico, normalmente se recetan medicamentos cuando se cree que los beneficios superan los riesgos. En otras palabras, si sufres de una ansiedad paralizante que casi con certeza afectará negativamente tu embarazo, los medicamentos pueden ser una buena opción.
Los ISRS atraviesan la placenta, pero se consideran razonablemente seguros durante el embarazo.Los bebés de madres que tomaron ISRS durante el embarazo pueden sufrir de síndrome de adaptación neonatal, con síntomas como nerviosismo, dificultad para alimentarse e irritabilidad.
Si ha tomado benzodiazepinas regularmente durante el embarazo, también se controlará a su bebé para detectar los efectos secundarios del medicamento.
También puede preguntarse acerca de la lactancia materna. Todos los ISRS tienen una baja concentración en la leche materna y son compatibles con la lactancia. También hay una gran cantidad de datos que respaldan la seguridad a largo plazo y la falta de efectos neurocognitivos negativos.
Una palabra de Psyathome
Simplemente puede preguntarse si es responsable quedar embarazada si tiene GAD. Cuando se trata con éxito, no hay ninguna razón por la que una mujer con GAD no deba tener hijos. Haga un plan con su médico sobre cómo manejar los síntomas si surgen y manténgase en contacto regularmente para mantener su ansiedad bajo control.