Cuando estás conversando con alguien, es común que tu mente se desvíe hacia otros pensamientos. Por ejemplo, tal vez tenga mucho en su plato y esté pensando en todo lo que necesita hacer. Tal vez acabas de discutir con tu pareja y todavía estás molesto por eso. O tal vez estés exhausto y comiences a fantasear con lo acogedora que será tu cama cuando te acuestes por la noche.
Cuando su mente comienza a divagar, es probable que todavía esté escuchando a la otra persona, pero no está escuchando realmente lo que tiene que decir. Sin embargo, esto puede tener un impacto negativo en tus conversaciones y relaciones con las personas, si sienten que rara vez las escuchas.
Con aportes de un psicólogo, este artículo desglosa las diferencias entre oír y escuchar y describe cómo afectan la salud mental. También proporciona algunos consejos para ayudarlo a convertirse en un mejor oyente y mejorar sus relaciones.
Oír vs Escuchar
“Mucha gente usa las palabras “oír” y “escuchar” indistintamente; sin embargo, hay varias diferencias importantes entre los dos”, dice kelly trabajador, PsyD, psicóloga del Centro Médico de la Universidad de Columbia. Según Workman, oír es la captación pasiva de sonido, mientras que escuchar es el acto de trabajar intencionalmente para comprender los sonidos (p. ej., palabras o ruidos de fondo) que escucha.
Kelly Workman, Psicología
El dicho ‘Por un oído sale por el otro’ habla de la diferencia entre oír y escuchar.
— Kelly Workman, PsyD
Escuchando
La audición es un proceso pasivo, involuntario y sensorial en el que percibimos sonidos. Es una respuesta fisiológica que involucra nuestra percepción del sonido. No requiere atención enfocada.
Por ejemplo, si está viendo la televisión, aún puede escuchar el sonido del tráfico o las sirenas afuera, el ladrido del perro de su vecino y la risa de la gente en el pasillo.
Escuchando
Escuchar es un proceso activo, voluntario e intencional que implica dar sentido a las palabras y los sonidos que escucha; requiere tu atención. A su vez, puede desarrollar una respuesta emocional a lo que escucha. Escuchar con la intención de comprender se conoce como escucha activa.
Por ejemplo, si estás escuchando a alguien hablar sobre un día difícil que tuvo en el trabajo, probablemente tendrás toda tu atención enfocada en esa persona. Mientras hablan, comenzarás a comprender cómo fue su experiencia y el impacto que tuvo en ellos. Esto lo ayudará a hacer comentarios reflexivos y hacer preguntas relevantes para comprender mejor su experiencia.
El papel de la audición y la escucha en la salud mental
Tanto oír como escuchar juegan un papel importante en nuestras vidas. Escuchar es una forma de información sensorial, mientras que escuchar es una forma de establecer conexiones con otras personas, según Workman. Ella explica el papel que juegan estas funciones en nuestra salud mental.
Importancia de la audición en la salud mental
La audición es un sentido importante que nos ayuda a navegar por el mundo. La pérdida de la audición puede tener un efecto profundo en la salud mental, ya que podría provocar ira, aislamiento social, cambios en nuestro sentido de autoestima y depresión.
Es importante tener en cuenta que usar el lenguaje de señas y prestar atención al lenguaje corporal son formas de escuchar sin el sentido del oído. Puede buscar atención de salud mental si está experimentando depresión o dificultades de adaptación debido a la pérdida de la audición.
Importancia de escuchar en la salud mental
Somos seres sociales y tenemos una necesidad universal de conexión y pertenencia. Escuchar es lo que nos permite desarrollar una mayor curiosidad sobre las experiencias de otras personas, una mayor compasión y empatía, y una mayor conexión.
Si no escuchas a los demás o no eres escuchado, puede afectar negativamente tu sentido de conexión y pertenencia. Probablemente puedas pensar en un momento en el que no te estaban escuchando; la experiencia puede haber hecho que se sienta devaluado, desatendido y solo, todo lo cual puede contribuir a sentimientos de vergüenza, ansiedad y depresión.
Escuchar e interactuar con los demás puede fortalecer sus relaciones. Del mismo modo, la falta de escucha puede crear tensión y distancia en las relaciones, dificultar la resolución de conflictos y afectar tu salud mental y tu bienestar.
¿Qué significa oír y no escuchar?
“La gente a menudo escucha con la intención de responder en lugar de la intención de comprender. Esto significa que confían más en oír que en escuchar”, dice Workman.
Workman enumera algunas razones por las que puede estar oyendo y no escuchando:
- Es posible que no hayas aprendido la habilidad de escuchar; esta es quizás la razón más común.
- Puede estar ocupado, distraído o soñando despierto.
- Es posible que tenga ansiedad social, lo que puede hacer que sea más difícil escuchar porque está concentrado en planificar qué decir a continuación o preocupado por lo que los demás piensan de usted.
Kelly Workman, Psicología
La implicación de escuchar en lugar de escuchar es que puede ser difícil sentirse conectado con los demás.
— Kelly Workman, PsyD
También es posible que no esté tan interesado, en cuyo caso, Workman dice que es importante verificar sus valores y tener conciencia de qué tipos de conexión y relaciones son importantes para usted y qué tipo de socio de comunicación quiere ser. .
Consejos para convertirse en un mejor oyente
De hecho, es posible convertirse en un mejor oyente. Workman sugiere algunos consejos que pueden ayudarlo a mejorar sus habilidades auditivas:
- Establezca una intención de mejorar: Establecer una meta clara para trabajar en sus habilidades de escucha puede ayudarlo a pensar más concretamente sobre cómo, cuándo y con quién puede practicar.
- Practica la atención plena: Mindfulness te ayuda a estar más presente. Puedes practicarlo simplemente notando lo que tiene tu atención en el momento; ¿Es la persona que te habla o es otra cosa? Si tu atención está en otra cosa, puedes redirigir suavemente tu atención a la persona al notar los cambios en su voz, las palabras que usa y sus expresiones no verbales.
- Ser curioso: Adoptar una mentalidad curiosa te permite escuchar y comprender de verdad. Al hacerlo, puede notar que automáticamente se vuelve aún más curioso e interesado en lo que dice la persona.
- Dejar de lado los juicios y suposiciones: Cuando juzgas y asumes cosas, esencialmente cierras la puerta a nueva información, lo que significa que es menos probable que prestes atención y escuches. Dejar de lado los juicios y las suposiciones también te ayudará a ser más curioso.
- Resume lo que estás escuchando: Repetir con tus propias palabras lo que escuchaste decir a la otra persona puede comunicar que estás comprometido y le da a la otra persona la oportunidad de aclarar cualquier malentendido.
- Hacer preguntas: Hacer preguntas abiertas y relevantes demuestra que estás escuchando y respondiendo de manera reflexiva. Si no está seguro de qué preguntar, puede intentar pensar en preguntas de quién, qué, cuándo, dónde o cómo.
- Usa gestos no verbales: El uso de señales no verbales, como hacer contacto visual y, ocasionalmente, asentir con la cabeza, puede comunicar que está escuchando y prestando atención.
- Intenta validar: Si bien brindarle a alguien toda su atención puede validar en sí mismo, ser capaz de reconocer cómo los pensamientos y sentimientos de alguien son comprensibles dada su historia o las circunstancias actuales puede ser muy significativo.
- Dar consejos solo si es necesario: No trate de resolver el problema ni de dar consejos a menos que eso sea lo que la persona está pidiendo. A menudo queremos ayudar a los demás, por lo que somos rápidos para ofrecer soluciones. Sin embargo, esto puede ser bastante invalidante para las personas porque muchas veces solo quieren ser comprendidas y escuchadas.
- Aparta las distracciones: Esto puede ser difícil ya que estamos constantemente rodeados de distracciones. Sin embargo, los pequeños gestos, como colocar el teléfono boca abajo para que no pueda ver los mensajes o las notificaciones, o alejarse de la pantalla de la computadora, pueden ayudarlo a estar más concentrado y atento.
- Practica ejercicios de escucha compasiva: Usted y un compañero pueden tomar de tres a cinco minutos cada uno para compartir una historia personal. Debe haber una pausa de 15 a 30 segundos antes de que la otra persona comience a compartir. Después de que ambas personas hayan compartido sus historias, puede tomarse unos minutos para discutir cómo fue escuchar y ser escuchado de esta manera.
Una palabra de Psyathome
Si bien a menudo equiparamos oír con escuchar, la primera suele ser una actividad pasiva, mientras que la segunda es más activa. De hecho, hay pasos que puede tomar para convertirse en un mejor oyente. Hacer el esfuerzo de escuchar activamente a las personas que te rodean puede ayudarte a conectarte con ellos y mejorar tus relaciones con ellos.










